Es necesaria una mirada nueva y un corazón nuevo para conocer bien los
caminos de Dios y para responder con alegría.
El mismo Juan Bautista que invitaba a todos a preparar el corazón para
acoger a Dios, les decía a algunos cómo debían comportarse en
situaciones concretas: "Compartid de lo que tenéis con quien no tiene y
necesita". Después de escuchar este evangelio podemos preguntar a
Jesús: "¿Cómo podemos preparar el corazón de modo que te acojamos en la próxima Navidad?"

No hay comentarios:
Publicar un comentario